martedì 25 agosto 2020

pc 25 agosto - Sabaotaggio al giornale A nova democracia Brasile - massima solidarietà internazionalista

Brasil. El periódico A Nova Democracia (La Nueva Democracia) ha denunciado una acción de sabotaje en sus instalaciones en el contexto de la agudización de las posiciones de derecha promovidas por el gobierno fascista de Jair Bolsonaro y el Alto Mando Militar que le sostiene. AND ha venido denunciando la fascistización del régimen en vías a un golpe reaccionario preventivo en marcha, el cual busca cancelar todas las libertades democráticas y los derechos del pueblo para imponer una nueva dictadura militar, de carácter reaccionario y anticomunista,
como el propio Bolsonaro lo ha sostenido públicamente. AND es una prensa popular y democrática con más de 15 años al servicio del pueblo, siendo clara y constante su participación en medio de las luchas de la clase obrera y las masas populares; por ello se ha convertido en blanco de los ataques de la reacción. Según informa AND el pasado 13 de agosto: “Un elemento, presentándose como técnico de un servicio de internet, ingresó al edificio con la justificación de que iba a “verificar la instalación del operador” en el acto, se dirigió a un centro de distribución (módem) de la sede y cortó con pinzas todos los cables eléctricos de internet y telefonía. No se tomó nada, no se instaló nada. Otros técnicos que acudieron a la sede después del hecho, con el fin de restablecer la conexión, confirmaron que se trató de un inconfundible acto de sabotaje. La propia compañía telefónica informó que ningún empleado responde sin una orden de servicio, lo que demuestra que el “técnico” era, en realidad, un elemento infiltrado. Meses antes se había identificado otro elemento que realizaba vigilancia en la sede del diario, durante dos semanas, todos los días y a la misma hora, en plena pandemia, comprobando la rutina, horario de salida y cierre del edificio. Se trata de una acción de sabotaje que, si bien puede parecer simple a los miopes, es muy grave y es, por su naturaleza, una operación de guerra psicológica. Los reaccionarios y fascistas quieren cerrar la prensa popular y democrática”.

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